Cuando escuchamos la palabra “millennials”, curiosamente la mayoría de nosotros pensamos en una persona joven, me atrevería a decir incluso en edad universitaria o recién incorporado al mercado laboral, con un lenguaje muy en línea con las formas de expresión típicas de las redes sociales y forrados con tecnología Smart (phone, whatch TV…). Y digo curioso porque, como decía un artículo publicado en la razón en el mes de septiembre, “los 'millennials' ya no son “los jóvenes”.
Por Iker García. Director de Servicios al Cliente en MK Media.
La generación de los millennials, generación del milenio o Generación Y, son los nacidos entre 1981 y 1999, que actualmente tienen una edad comprendida entre 21 y 38 años, lo que significa que los más mayores de la generación hoy rozan los 40 años. No me malinterpretéis. No digo que tener 40 años no sea ser joven, pero seguro que no pensamos en ese perfil de edad cuando escuchamos el término.
Mucho se ha hablado sobre la peculiaridad de esta generación. Se le atribuyen características únicas que les hace diferentes de generaciones pasadas, habiendo nacido en una época de prosperidad. Los medios coinciden en que son críticos, exigentes, reformistas, poco materialistas, comprometidos, digitales y participativos, pero también viven con la etiqueta de ser perezosos, narcisistas y consentidos.
Probablemente, opiniones tan dispares estén motivadas por la horquilla tan amplia que existe entre los rangos de edad del millennial más joven al millennial más adulto. Evidentemente, el momento vital y las necesidades de una persona de 20 años no son las mismas que las de una persona de 34, y también precisamente por eso, suponen una generación de transición, siendo la última en muchas cosas y la primera en otras tantas. Están entre lo viejo, que no acaba de morir, y lo nuevo, que no acaba de nacer.
Y, ¿qué relevancia tiene esto en nuestro sector? Pues que a día de hoy suponen el 36% de la fuerza laboral del país, algunos de ellos ocupando ya posiciones de poder. Los millennials hoy son nuestros clientes, los clientes de nuestros clientes, nuestros proveedores, nuestros equipos, nuestros compañeros o hasta nosotros mismos.
¿Conocemos entonces nuestro entorno laboral, las necesidades de nuestro mercado o las expectativas de nuestros clientes y equipos? y, como agencias, ¿estamos preparados para dar respuesta a estas necesidades?
Parece clave tener una radiografía perfecta de los millennials para poder estar a la altura de sus expectativas, tanto en lo personal como en lo profesional. Según los medios, hay 5 claves a tener en cuenta para cubrirlas:
1. Creatividad
Un aspecto fundamental para los millennials es moverse e interactuar en entornos estimulantes y modernos. Es más fácil que quieran involucrarse en proyectos que supongan un reto cada día que en proyectos monótonos que resultan aburridos y responden a menudo a metodologías fijas. Cuanta más libertad tengan para aplicar su criterio mayor será el interés por el proyecto.
2. Tecnología e innovación
El uso de la tecnología forma parte de su ADN. Es la primera generación de la historia conectada 24/7 y valoran positivamente el uso de la misma. Pero no todo vale. La tecnología ha de estar implementada de una manera justificada e inteligente, formando parte de un todo para conseguir el efecto WOW. No obstante, la innovación no pasa siempre por algo tecnológico. A veces basta con revisar procesos y formas de hacer para incluir variaciones que nos den resultados distintos.
3. Relaciones horizontales
Debido a su carácter social, valoran positivamente las relaciones más horizontales, a diferencia de otras generaciones acostumbradas a interacciones limitadas y estructuras marcadamente verticales. Tienen un concepto sobre el liderazgo basado en el reconocimiento de sus méritos, que potencie sus capacidades y les guíe hacia la consecución de nuevos retos de manera exitosa.
4. Vida social
Para ellos es fundamental encontrar un equilibrio entre lo profesional y la vida personal. La flexibilidad horaria y geográfica son la clave en este sentido. Por un lado, reclaman que se premie los resultados por encima del número de horas que permanecen en la oficina, con una flexibilidad horaria tanto de entrada como de salida. Trabajo por tarea/objetivo por encima del cumplimento de un horario fijo. Por otro, fomentar espacios de trabajo para desarrollar sus funciones que no sean necesariamente la oficina. Un trabajo en movilidad, facilitado por el uso de las nuevas tecnologías.
5. Remuneración holística
Evidentemente, la remuneración económica sigue siendo uno de los principales alicientes, pero no la única ni necesariamente la más relevante. Los millennials consideran su trabajo un pilar fundamental de sus vidas, por tanto, buscan sentirse valorados, que se reconozcan sus méritos y se cuide su bienestar, para establecer relaciones duraderas y retener su talento.
Y después de todo esto, ¿qué?
Pues básicamente tenemos que desarrollar, si no lo hemos hecho ya, una consciencia MINDLENNIAL que nos recuerde que ya forman parte de muchos de los entornos por los que nos movemos y que actuemos en consecuencia aplicando esos tips que nos permitirán seguir aportando valor dentro y fuera de las compañías. Y tú qué eres ¿millennial o mindlennial?
Fuentes:
https://www.nielsen.com/us/en/insights/report/2017/millennials-on-millennials-digital-music-and-communication/
https://iabspain.es/estudio/top-tendencias-digitales-2018/
https://elpais.com/politica/2017/03/04/actualidad/1488647914_007106.html
https://www.larazon.es/familia/20191112/lpflvkkxmnacxlteczvyfvrtme.html
https://verne.elpais.com/verne/2019/09/03/articulo/1567503128_722598.html
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