Gracias por no haber dejado nunca de correr

Por Laura Sabio Manzano. Estrategia y Marketing Digital en ENE Life.

Te levantas todos los días pensando qué puedes hacer. Te armas de algo tan valioso como el conocimiento de muchos anteriores a nosotros depositado en aquellos que estamos aquí actualmente. Te haces aliado de la ciencia y la evidencia científica. Formas equipo con mucha gente de gran valor, no solo por su actitud, sino también por su aptitud. Personalizas tu objetivo: es la salud de tu madre, tu padre, tu vecino, ese abuelo tan majo que siempre sonríe y ese niño que te sacó la lengua en el parque. ¿Cuál será el próximo movimiento? caminas, paso a paso, planificas, creas, confirmas, ordenas, miras atrás, sigues adelante. La carrera sigue ahí, tú sigues ahí.

Hasta que llega un día en que todo se frena en seco.
Sí. Ya sabes. Ese día.
El 31 de enero de 2020. El inicio del contagio en España.

Teletrabajo, confinamiento, supermercados vacíos, cifras de muertos nunca antes mencionadas, arcoíris en las ventanas, “pregunta al vecino mayor si necesita algo”, “mascarillas ¿De qué tipo? ¿Quedan?”, “volveremos a vernos”, aplausos a las 8 de la tarde desde el balcón.

¿Qué está pasando? No. ¿Qué va a pasar?

Echas cuentas. No podemos parar. Existen 25 millones de personas en España que toman al menos un medicamento al día y a los que hay que garantizarles el suministro. Tenemos que mantener los ensayos clínicos. Tenemos que ayudar a los servicios de salud, a los hospitales y a las demás organizaciones que están lidiando directamente con el problema. También tenemos tratamientos ya utilizados o en investigación que podemos poner en común con otros para ver si nos sirven frente al virus. Hay que encontrar la forma de que no paremos nosotros, sino de que pare esto. Tu trabajo es esencial. Continúa la carrera de fondo, aunque todo lo demás se detenga.

¿Hacia dónde vamos? ¿Estamos avanzando?

Miras al pasado. Esto ha ocurrido, no igual, pero tenemos registros; no es la primera pandemia, podemos continuar. Sigue en marcha. Todo se para, pero tú no. Nosotros no. Porque el dolor, el sufrimiento, la enfermedad y la muerte no entienden de tiempos, están ahí todo el tiempo; enfrentarse a ellos es solo cuestión de tiempo.

Bajo la misma bandera, la de la Ciencia, caminas al lado de grandes compañeros: investigadores, farmacéuticos, médicos, enfermeros y miles de profesionales que, lejos de lo que todos esperábamos, no paran cuando el mundo pide a gritos que todo se pare. Otros alzan diferentes estandartes: limpieza, suministros, transporte, ayuda, protección, enseñanza... Ellos también forman parte del equipo que hace que el mundo siga girando, que todo funcione.

¿Qué hacer cuando te enfrentas día a día a una carrera de fondo?

Pues... sigues ahí. Y los demás te damos las gracias por ello.

Sabemos que hay muchas personas imprescindibles a las que dar las gracias por no dejar de correr. Pero esta vez queremos darte las gracias a ti, que has trabajado en la industria farmacéutica sin descanso desde febrero de 2020 para paliar los frentes abiertos por la COVID-19: Al personal de las 160 plantas de producción farmacéutica existentes en nuestro país, a los investigadores, a los distribuidores, a las redes de ventas, al personal de este sector que ha continuado con la carrera de fondo para evitar el desabastecimiento de medicamentos durante la pandemia, llegándose a duplicar o incluso triplicar la producción con ritmos de 24 horas durante los 7 días de la semana.

Hemos confirmado que en España tenemos una industria farmacéutica a la altura de las circunstancias, capaz de adaptarse a cualquier necesidad y de realizar una colaboración sin precedentes. Es un arduo camino, todavía por continuar, pero que le ha valido para erigirse como líder de la ya considerada mayor carrera investigadora de la historia.