Entrevista a Raquel González Zamarreño, Directora General en CESIF

Ante este escenario, contar con equipos y directivos de alta calidad preparados para la toma de decisiones e implementación de estrategias en este contexto se vuelve clave.

Raquel González, directora general de CESIF, nos explica en esta entrevista cómo es imprescindible entender y fijar tus propias metas profesionales, mantener un enfoque de Lifelong learning y qué puntos clave son esenciales a la hora de elegir una formación y un centro de educación superior.

Con más de 15 años de experiencia dentro del sector educativo, Raquel González, nos cuenta cómo es imprescindible aunar un conocimiento sobre las necesidades de las compañías y de los profesionales que desarrollar su carrera en ellas, de cómo aportan valor a cada proyecto, con un foco constante en el alumno y sus metas.

En el entorno actual, ¿crees que el concepto de formación continua, su necesidad y beneficios ya está asumido por los profesionales?
Me cuesta imaginar un entorno en el que no sea necesario formarse a lo largo de tu carrera profesional. Me parece imprescindible en cada uno de los sectores actuales y probablemente futuros (alguno de los cuales están comenzando a dibujarse). El concepto de Lifelong learning no es nuevo, ya Platón consideraba como necesaria esa visión. En la Unión Europea, ya celebramos el año de la formación permanente y continua en 1996.

La realidad es que ésta se ha complejizado y cada vez todos somos más exigentes. Dedicar nuestros recursos limitados -como el tiempo y el dinero- a formarnos, nos convierte en usuarios exigentes que necesitamos garantías de que esa inversión va a ser satisfactoria. Por eso, es imprescindible confiar en centros en los que el prestigio y la calidad formativa nos aporte la seguridad necesaria para tomar las decisiones más adecuadas para nuestro desarrollo.

¿Qué aporta un máster frente a un grado o por qué se recomienda su realización?
Creo que antes de tomar ninguna decisión al respecto es imprescindible entender y fijar tu propia meta profesional. Además, es recomendable recordar las palabras de Peter Drucker en las que recuerda que “las carreras de éxito no están planificadas. Ocurren cuando la gente está preparada para aprovechar las oportunidades (…)”.

En este sentido, los estudios de grado plantean una sólida base de conocimientos que permite enfocar una carrera profesional de forma coherente. Sin embargo, posteriormente resulta imprescindible cursar un postgrado que permita la conexión entre los conocimientos universitarios, más teóricos, con la actividad profesional.

Debe ser, a través de los estudios de Máster, donde los profesionales adquieren una visión práctica de los conocimientos que adquieren, una perspectiva funcional de su profesión y la ampliación de su red de contactos.

Creo que el año de Máster es ese año en el que debemos tener acceso a profesionales que nos inspiren en nuestro futuro desarrollo (profesores) y en el que formaremos nuestra propia red de compañeros y amigos que nos acompañarán en las futuras etapas profesionales, apoyando y compartiendo experiencias con nosotros. Estoy segura de que todos los que hemos tenido la suerte de pasar por esta etapa la recordamos con mucha ilusión y tenemos nuestra propia red formada en esa época y reforzada con el paso de los años.

¿Cómo elegir el máster o programa executive más adecuado?
Es muy importante tener claro que la realización de un Máster o un Programa Executive es una inversión y ésta tiene que realizarse de la forma más segura posible.

Me parece sencillo identificar las claves para lograrlo. Creo que para esta decisión podemos aplicar el criterio estas 4 P´s:

1. Primero el prestigio de la escuela en la vamos a decidir estudiar y su reconocimiento en el sector resulta fundamental.
La formación de postgrado debe aportar valor desde el primer momento, y esta variable objetiva resulta muy significativa en los procesos de selección en los que se vaya a participar.

2. Una vez seleccionada el ámbito de especialización, resulta imprescindible que repasemos el programa de contenidos y nos aseguremos de que son actuales y adaptados a la realidad profesional del sector en el que queremos desarrollar nuestra actividad.

3. Además del programa, que el claustro cuente con profesores profesionales en activo, vinculados a compañías de éxito, es garantía de que tendremos la oportunidad que acceder a la formación práctica que necesitamos.

4. Como último punto, revisar los partners que garantizarán las oportunidades de prácticas si estamos en un programa de perfil junior, o la actividad de la bolsa de empleo para programas executive, en el caso de que estemos buscando un cambio profesional, resulta imprescindible.

Un equilibrio entre estos cuatro factores será clave para abordar una nueva etapa en nuestra trayectoria, independientemente del momento en el que la abordemos.

¿Cómo podría ser un entorno que reúna las 4 P´s?
La trayectoria de CESIF, que desarrolla su actividad desde hace más de 30 años, nos ofrece una posición muy sólida en la formación para sectores salud, biotecnológico y de industrias farmacéutica, cosmética, química y alimentaria. Esta extraordinaria historia nos permite mantener acuerdos, convenios y colaboraciones con casi la totalidad de compañías de estos sectores.

Es un orgullo contar con muchos de nuestros Antiguos Alumnos como directores de programa, como profesores y como colaboradores directos en el desarrollo profesional de nuestros estudiantes actuales. Todos ellos han desarrollado una carrera profesional exitosa tras haber pasado como estudiantes por nuestras aulas, y vuelven a ofrecer sus conocimientos y experiencias a aquellos que se encuentran en su misma situación hace unos años. Creo con sinceridad que este escenario facilita la inspiración a todos nuestros alumnos y alumnas.

¿Cuál crees que es el futuro de la educación?
Es evidente que estamos ante un nuevo entorno, en el que las relaciones y el equilibrio entre todos los ámbitos de nuestra vida ha cambiado. En este sentido, hace años que desde el sector educativo trabajamos para el desarrollo de metodologías activas, que aprovechen las bondades de la formación presencial, blended, remoto, streaming, online… En toda esta evolución la tecnología para la educación ha tenido un papel protagonista y hemos aprendido a utilizarla de la forma más útil en cada momento.

Especialmente durante el último año, el crecimiento y la adaptación de profesores y estudiantes a estas nuevas formas de aprendizaje ha incrementado de forma exponencial. Las escuelas que hemos sabido adaptarnos a este nuevo paradigma, estamos más preparadas para seguir acompañando a los futuros profesionales de éxito de cada sector con formaciones que se adaptan mejor a sus horarios y ritmos y con metodologías que potencian su aprendizaje.

Nuevos modelos de negocio, transformación digital, sostenibilidad, normativas más exigentes, nuevas demandas de los usuarios, … son numerosos los retos, ¿por dónde empezar?
No soy partidaria de dar consejos, pero creo que cada uno debe construir su propio perfil de acuerdo a sus propias competencias y la meta que se haya planteado. Un perfil profesional se construye con el tiempo, esfuerzo constante y foco. Formación, experiencia y desarrollo competencial resultan claves.

Creo firmemente en que dedicar tiempo a analizar nuestro perfil y nuestra evolución es uno de los primeros pasos para abordar un desarrollo, pero esto también requiere esfuerzo y objetividad, además de técnica y apoyo.

Me parece fundamental tener identificados referentes y entidades que nos ayuden en el camino de autoevaluación y plan de desarrollo. En CESIF, desde nuestro departamento de Carreras Profesionales, tenemos a disposición de nuestros alumnos y antiguos alumnos las herramientas, experiencia y referentes necesarios para acompañar en esta travesía. Siempre a disposición de nuestra red para avanzar juntos para afrontar nuevos retos.

Nuestro objetivo último es formar a profesionales con un alto nivel de especialización para que accedan a las diferentes posiciones que ofrecen las empresas.