¿Hay conocimiento en España de lo que es la hepatitis y de las distintas enfermedades hepáticas que existen?
Lo cierto es que las enfermedades hepáticas en general están algo invisibilizadas, existiendo cierta tendencia a achacar cualquier problema del hígado al consumo de alcohol cuando la realidad es mucho más amplia. Quizás a partir de conseguir la cura del VHC en 2015, las enfermedades hepáticas se pusieron de actualidad, gracias también al movimiento iniciado por las asociaciones de pacientes.

¿Cómo sufre esta enfermedad el paciente hepático en su día a día?
Las enfermedades hepáticas tienen un gran peligro y es su frecuente condición asintomática. Y es que las hepatitis pueden no "dar la cara" hasta estar ya en un estadio muy avanzado de la enfermedad, lo que dificulta su tratamiento.

¿Cuál es el papel de la FNETH ante esta enfermedad?
En FNETH llevamos tiempos inmersos en un giro de argumentario. Si antes la Federación enfocaba más su labor al trasplante de órganos, como solución última a las enfermedades hepáticas, ahora nos estamos centrando más en la prevención de las enfermedades para evitar tener que llegar al trasplante. Promoviendo la detección temprana de enfermedades hepáticas ya sean de tipo viral o relacionadas con los hábitos de vida como puede ser el NASH.

Hace unos meses lanzaron la campaña ‘Sé magia’. ¿En qué se basaba esta acción y cuál fue su resultado?
La idea de la campaña era hacer hincapié en la eliminación de las hepatitis víricas en España, en especial de la Hepatitis C. Este no es un objetivo de la FNETH solamente, sino de la propia OMS que marca 2030 como año diana para conseguir la eliminación del VHC. Con 'Sé Magia' queríamos dar ese empujoncito para conseguir el objetivo ya que España, antes de la pandemia, estaba muy bien situada para cumplirlo.

¿Qué soluciones tiene actualmente en España un enfermo hepático? ¿Son suficientes?
Ciertamente depende de la enfermedad hepática que se padezca ya que las soluciones son variadas. El enfermo por Hepatitis C actualmente puede acceder a medicamentos que le van a curar, mientras que otros como los enfermos por Hepatitis B disponen de tratamientos que cronifican su condición minimizando los síntomas. Por otro lado, enfermedades hepáticas de una prevalencia creciente como el hígado graso o NASH no disponen aún de tratamientos farmacológicos eficaces, por poner varios ejemplos.

¿Cuál es el papel del farmacéutico ante esta enfermedad?
El papel del farmacéutico es fundamental para los pacientes hepáticos, sobre todo en lo que se refiere a la adherencia al tratamiento por parte del paciente. También es importante el rol pedagógico, como guía del paciente para que haga un correcto uso de su medicación.

¿Cómo se imagina el futuro de la hepatitis y sus pacientes?
En un futuro ideal las hepatitis víricas habrán desaparecido. Esto es casi utópico, pero quiero pensar que es posible llegar  a un punto en el cual su incidencia sea completamente anecdótica como ha pasado con otras enfermedades virales a lo largo de la historia. No obstante tenemos nuevos retos por delante; pronto veremos como el NASH o hígado graso empieza a tener una mayor repercusión social, ya que su prevalencia empieza a ser muy alta. Nuestra labor será hacer de altavoz para prevenir que el problema que ya hay, pueda convertirse en insalvable.