Entrevista a la Dra. Marisol Bravo, portavoz de la FEC (Fundación Española del Corazón).
Aproximadamente la mitad de los españoles adultos padecen de hipercolesterolemia y, a su vez, el 46 % de ellos no saben que tienen este factor de riesgo cardiovascular. ¿Qué nos dicen estas cifras?
Nos encontramos frente unos datos preocupantes ya que pueden identificarse y remediarse de manera muy sencilla porque hasta el 80% de las enfermedades cardiovasculares se podrían prevenir si tuviéramos bien controlados los factores de riesgo.
La hipercolesterolemia o colesterol alto no va a darnos síntomas hasta que realmente el daño esté hecho: actúa de manera muy silenciosa y a lo largo de los años va obstruyendo nuestras arterias del cuerpo, tanto que en el futuro podría acabar produciéndose un infarto o un ictus, así que debemos estar atentos y tomar medidas al respecto.
Después de los excesos navideños se puede producir una subida del colesterol hasta del 15%, ¿qué deberíamos hacer ante este hecho?
Las navidades no son solamente esos 4 o 5 días de comidas familiares, es un mes y medio donde arrastramos cenas, encuentros de empresa o comidas con amigos que conllevan un cierto abandono del hábito saludable. De aquí la importancia de hacerse analíticas rutinarias según las indicaciones del médico de Atención Primaria y volver cuanto antes a un estilo de vida y alimentación saludable.
Una vez ya hemos identificado nuestro problema, ¿cómo le ponemos remedio? ¿Cuáles son los alimentos más indicados?
A parte de hacer ejercicio regular es importante seguir una dieta cardiosaludable. En este sentido la mediterránea es una muy buena aliada. Es recomendable:
- Comer entre 2 a 3 raciones de fruta y verdura al día y cereales, a poder ser integrales. En general consumir productos que tengan mucha fibra.
- Tomar pescado graso y azul una vez a la semana, como mínimo.
- Limitar las carnes rojas, comiendo como máximo 350 g-500 g a la semana, y apostar por carnes blancas.
- Comer un puñado de frutos secos sin sal al día.
- En cuanto al agua, es importante beber 2 litros diariamente.
En las personas que se les ha descontrolado excesivamente el colesterol, es de gran ayuda tomar fitoesteroles vegetales, los cuales encontramos en los frutos secos y las verduras, pero en baja cantidad. Cuando una ayuda es necesaria, los lácteos enriquecidos con fitosteroles vegetales son una buena opción, pues contienen una mayor cantidad de estos. Consumir una dosis diaria en una cantidad de 2 g, después de la comida, ha demostrado que reduce entre un 7 y un 10 el colesterol malo.