“Entender las demandas y gaps en la salud femenina puede ofrecer una oportunidad de diferenciación y una ventaja competitiva para aquellas empresas que se dediquen a conocer en profundidad a este target y a sus necesidades”.
Las mujeres representan la mitad de la población mundial y 80% de las decisiones de compras de los consumidores en la industria de la salud. Aun así, su salud ha sido considerada un nicho de mercado por mucho tiempo. Sin embargo, ahora esto parece estar cambiando: el gobierno y las empresas empiezan a darse cuenta de los sesgos de género que acompañan el cuidado a la salud femenina y la sociedad demanda una mayor equidad en la atención sanitaria, haciendo que la investigación y concienciación sobre la salud de la mujer sea una tendencia en sí misma. En este artículo exploraremos algunas oportunidades específicas de este sector.
¿QUÉ ES LA SALUD DE LA MUJER?
La salud femenina es mucho más cambiante, cíclica e incomprendida que la masculina. Cuando pensamos en la salud de la mujer, pensamos sobre todo en su ciclo reproductivo y las demandas de cada una de sus etapas. Y es que, aunque no todas las mujeres pasarán por un embarazo, todas experimentarán la menarquía y la menopausia, los cambios de humor y las fluctuaciones hormonales dentro del ciclo menstrual, y todas las consecuencias en su bienestar físico y mental.
Más allá de la reproducción, Mckinsey define la salud de la mujer como aquellas condiciones específicas de las mujeres – relacionadas a su biología – y condiciones de salud generales que pueden afectar a las mujeres de manera diferente o desproporcionada, en la cual se incluyen enfermedades cardiovascular, migrañas y enfermedades autoinmunes, por ejemplo (exhibit 1). En ambos casos cabe destacar que sigue siendo un campo muy poco estudiado en el que aún queda mucho por descubrir.
Por ello, entender las demandas y gaps en la salud femenina puede ofrecer una oportunidad de diferenciación y una ventaja competitiva para aquellas empresas que se dediquen a conocer en profundidad a este target y a sus necesidades.
A continuación, exploraremos algunos de los caminos para destacarse en este mercado.
OPORTUNIDAD 1: CERRANDO LA BRECHA DE GÉNERO
Durante muchos años las mujeres han enfrentado desafíos y desigualdades de género significativas en la atención médica y acceso a la asistencia sanitaria. Con frecuencia, han sido y son subdiagnosticadas e infra-tratadas, especialmente en cuanto a síntomas y problemas de salud femeninos, como los trastornos menstruales y enfermedades como endometriosis, síndrome del ovario poliquístico o condiciones relacionadas a la menopausia.
Estas desigualdades también están reflejadas en los ensayos clínicos: este grupo está notoriamente infrarrepresentado en la investigación científica y, en consecuencia, tiene un mayor riesgo de experimentar una reacción adversa a un medicamento en comparación con los hombres.
En respuesta a este escenario, las empresas tienen la oportunidad de buscar un enfoque equitativo de la salud, dando visibilidad a este problema y, a la vez, eliminando sesgos y desigualdades. Concretamente, realizando nuevas investigaciones con mujeres, capacitando profesionales sanitarios sobre condiciones específicas de las mujeres y desarrollando soluciones pensadas exclusivamente para las mujeres y sus necesidades.
OPORTUNIDAD 2: CUIDANDO EL CICLO DE VIDA
Hasta hace bien poco, el enfoque de las etapas vitales en la salud de la mujer (menarquia, pubertad, fertilidad, embarazo, etc.) carecía de una atención detallada. Momentos clave han sido históricamente dejados de lado, en una aproximación que no reconocía por completo sus necesidades específicas.
Como respuesta a esta demanda, se está buscando desarrollar soluciones diseñadas para abordar estas distintas fases y condiciones de salud asociadas a ellas, permitiendo acceder a opciones más adecuadas según contexto y problemática de cada mujer. Entre las diferentes etapas, una que viene ganando especial atención es la menopausia que, aunque sea un proceso natural y esperado, es un tema poco comentado. Esto resulta no solo en desconocimiento y dificultad para identificar síntomas, sino también en poca atención a las mujeres que atraviesan este período.
En este sentido, se hace necesario concienciar sobre la menopausia y redefinir la experiencia de la mujer alrededor de esta etapa, sea a través de soluciones innovadoras para aliviar síntomas y molestias, sea a través de acompañamiento y educación a lo largo del proceso. Este movimiento no solo responde a una búsqueda por mayor equidad en salud, sino una gran oportunidad de mercado, puesto que cada vez más mujeres entran en esta etapa.
OPORTUNIDAD 3: USANDO LA TECNOLOGÍA A FAVOR DE LA MUJER
La tecnología aplicada a la salud de las mujeres es un sector aún emergente, que se está haciendo poco a poco con un lugar en el mercado. La inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (machine learning) están surgiendo como fuerzas dominantes gracias al incremento de datos relacionados con la salud femenina. Esto queda reflejado en varios ámbitos: desde el sueño hasta la fertilidad, pasando por etapas como el embarazo, la lactancia y un posible cáncer. Aunque el uso de herramientas digitales para el monitoreo de la salud no es algo nuevo, la integración de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático amplía exponencialmente el rango de soluciones que puede proporcionar el mercado.
Es en este contexto que emerge el concepto de "Femtech": empresas que emplean tecnología para abordar las necesidades específicas de la salud y el bienestar de las mujeres. Este es un sector en expansión a medida que las tecnologías digitales y móviles se integran más profundamente en la esfera de la salud femenina, ofreciendo herramientas personalizadas y accesibles para el cuidado de la salud a lo largo de diferentes etapas de la vida de las mujeres. Este impulso hacia la individualización y la accesibilidad está redefiniendo la forma en que las mujeres abordan y gestionan su bienestar a lo largo de sus vidas.
En este sentido, la tecnología puede ser empleada, entre otras cosas, para el apoyo médico en tomas de decisiones y para mejorar procesos de diagnóstico, además de facilitar el intercambio de información con fines educativos y sociales, sea a través de aplicaciones, o de comunidades enfocadas en acompañar a la la salud femenina.
OPORTUNIDAD 4: SOLUCIONES NATURALES
En la búsqueda constante de un estilo de vida más equilibrado y sostenible, cada vez más personas, y en especial el colectivo femenino, están recurriendo a alternativas naturales para el cuidado de la salud y buscando enfoques más holísticos y menos convencionales tanto en tratamientos, como en prevención. Una de las razones detrás es el deseo de evitar los efectos secundarios a menudo asociados con los medicamentos farmacéuticos tradicionales, o mitigar algunos de estos efectos.
Este tipo de soluciones abarcan una amplia gama de prácticas y productos, desde la medicina herbal hasta la aromaterapia y el uso de suplementos alimenticios, y también los productos de cuidado íntimo – que atravesaron un boom de lanzamientos en los últimos años. El V-care – como es conocido – se relaciona al autocuidado y suele basarse en ingredientes que respeten y equilibren el pH vaginal. También destacan los pre y probióticos vaginales u orales enfocados a la microbiota vaginal.
Las empresas - conscientes de esta búsqueda por naturalidad – tienen la oportunidad de, por un lado, promover fórmulas más naturales quitando ingredientes considerados nocivos y promoviendo ingredientes más conocidos por los consumidores, y por otro, comunicar con frecuencia el claim de naturalidad o el de “free from”.
La salud de la mujer es un campo que ofrece amplias oportunidades de innovación para empresas dispuestas a responder a una creciente demanda por soluciones que lleven en cuenta necesidades – fisiológicas, psicológicas y sociales – y dolores específicos de este grupo. No obstante, esto exigirá un interés real en entender este grupo y los perfiles dentro de ello, en un movimiento por empezar a cerrar de manera consistente la brecha de género en el sector de la salud.