Como en su día ya dijo Darwin, la supervivencia de cada especie va a depender de la capacidad de adaptación que tenga a los cambios producidos en el medio en que habita. Y en adaptarnos a los cambios, las agencias especializadas en servicios científicos que sobrevivimos en el S. XXI nos estamos convirtiendo –a marchas forzadas- en unos expertos. La crisis existente ha obligado a cambiar la forma de relación y el tipo de actividades ofertado entre la industria farmacéutica y los médicos. El medio online es hoy en día la forma de sobrevivir. El éxito pasa por garantizar una oferta de servicios que dé respuesta a necesidades reales existentes con la mejor usabilidad y accesibilidad disponible.
“Cómo han cambiado las cosas… me acuerdo que hace 3 ó 4 años, sobretodo los viernes al mediodía, casi ni se podía entrar al CAP (Centro de Atención Primaria) de la cantidad de delegados que había. Ahora si hay dos o tres ya son muchos… hasta les echamos de menos”. Estas son palabras reales de un médico de Atención Primaria que reflejan que, efectivamente, las cosas han cambiado mucho en lo que a visita médica se refiere. Según datos de la CEATIMEF (Confederación Española de Asociaciones Profesionales de Visitadores Médicos), desde el comienzo de la crisis, el sector ha perdido más de 8.000 puestos de trabajo, es decir, se ha contraído en un 47 por ciento, casi la mitad, ahí es nada.
Así pues, ante esta nueva realidad en la que las relaciones humanas tiende a extinguirse, hay que buscar alternativas para no perder el pulso con el colectivo médico.
Por otra parte, las medidas de ajuste de la jornada laboral que han sufrido los profesionales sanitarios, con las que han visto incrementada su actividad asistencial, hace que no tengan tiempo suficiente para atender a necesidades formativas, a no ser que las realicen a expensas de su tiempo libre y ocio. En un estudio de casi 3.000 encuestas realizadas en toda España, realizado por el SMA (Sindicato Médico Andaluz), se desvela que el 69% de los facultativos dedican ya cinco o más horas a su formación fuera de su horario laboral. Estos datos pone en peligro, por falta de tiempo, la asistencia o realización de actividades de actualización de conocimientos que se venían realizando con asiduidad por la industria farmacéutica y que eran una herramienta de las redes de venta menos comercial y más científica, en definitiva mejor valorada por los médicos.
En este sentido, una vez más, las nuevas tecnologías parece que se erigen como sustitutas al, por otro lado insustituible, contacto y servicio humano. Estamos adentrándonos en una nueva manera de establecer y mantener el contacto con nuestros clientes que dará mucho que hablar.
Para hacer realidad esta nueva situación se están poniendo en marcha soluciones innovadoras que pasan por el desarrollo de plataformas online de servicios, aunque la gran avalancha no garantiza la utilidad de todas ellas, porque, como en cualquier sector, hay que conocer el qué, para quién, cómo y dónde, ya que no todas son igual de eficientes.
Si nos paramos a pensar podríamos enumerar los puntos fuertes que debe cumplir una buena plataforma de servicios médicos aunándolos en estos cinco:
1. Ofrecer un servicio diferencial para el profesional, que aporte valor real a su práctica clínica y que asegure la recurrencia en la utilidad de la plataforma.
2. Posibilitar el contacto entre especialistas, más allá de un foro común, donde, a pesar de la distancia o del desfase horario, el especialista pueda encontrar un lugar de encuentro con colegas donde consultar o en el que den solución a sus inquietudes del día a día.
3. Ofrecer una actualización permanente que garantice una renovación continua con las últimas noticias, publicaciones o novedades del sector y que avise al usuario de dichas actualizaciones.
4. Contar con una buena campaña de comunicación, que asegure el tráfico hacia la página.
5. Resultados medibles, a partir de métricas que permitan valorar el ROI de la herramienta.
No obstante, poder cumplir con estos puntos fuertes pasa por dos requisitos imprescindibles: 1) dar respuesta a la/s necesidad/es del usuario y 2) ofrecer el servicio en las condiciones más sencillas para el usuario en cuanto a accesibilidad y usabilidad. Con esto estaremos seguros de la utilidad para el profesional, porque responde a una demanda real y su acceso y utilización es fácil e intuitivo.
Por lo tanto, así como no hay dos médicos iguales tampoco hay, ni debe haber, dos plataformas de servicios iguales si realmente se adaptan a las necesidades de cada especialidad. A modo de ejemplo, para que les pueda servir de inspiración, nos adentraremos en cuatro tipos de plataformas concretas que dan solución, cada una de ellas, a necesidades completamente distintas:
1. Plataformas de servicio diagnóstico oncológico. Las nuevas terapias dirigidas están exigiendo de un diagnóstico personalizado que hoy por hoy no está al alcance de cualquier hospital. Diseñar una plataforma que facilite este diagnóstico a través de la identificación de biomarcadores (BRAF, EGFR, KRAS…) en Centros de Referencia, permite dar solución a una necesidad existente tanto para oncólogos como para anatomopatólogos. Estas plataformas consiguen un diagnóstico rápido que proporciona al oncólogo una herramienta más de decisión a la hora de poder ofrecer un tratamiento más específico a sus pacientes. Estas plataformas deben ser rápidas e intuitivas y responder a un máximo de interconexión entre todos los implicados. Solo así se puede conseguir que la solicitud realizada por los miembros del hospital solicitante sea sencilla y que el resultado llegue a todos los implicados en el tiempo y las condiciones estimadas. Una buena plataforma es aquella que consigue realizar todo el proceso y enviar el resultado al hospital solicitante en no más de 4 días desde que la muestra llega al centro de referencia.
2. Plataformas de actualización continua. Más allá de las plataformas de elearning existentes en la red que permiten una actualización sobre un tema concreto, conseguir una buena plataforma de actualización permanente pasa por poner al alcance del especialista las últimas novedades del área de su especialidad (noticias, publicaciones científicas, información de congresos…). Proporcionar una plataforma que ofrezca esta información puede ser, actualmente, la mejor herramienta comercial. El problema es que muchas plataformas se construyen con este objetivo pero, tras los primeros meses, dejan de actualizarse. La actualización continua supone una inversión fuerte tanto en el desarrollo, como en lo que es más importante, el mantenimiento de la plataforma. Cualquier plataforma que se precie en este sentido pasa por contar detrás con un equipo tanto científico como técnico que permita esta actualización permanente. Se trata de sustituir las reuniones de antaño por un equipo humano detrás de la plataforma que permita ofrecer este servicio. Sin embargo, se pueden contar con los dedos de una mano las plataformas de estas características que hoy en día están disponibles y son referentes por ofrecer una actualización permanente.
3. Plataformas que permiten compartir experiencia clínica. En este tipo se incluyen todas aquellas en las que diferentes expertos pueden ponerse en contacto con otros para compartir casos o experiencia clínica. Estos formatos pueden ser unidireccionales, siendo el experto quien comparte su experiencia con el resto de usuarios, o bidireccionales, en los que es posible una conexión entre los diferentes usuarios. Más allá de los webinars o la posibilidad de consultar a un experto, nos referimos a plataformas que ofrecen una conexión más personalizada, como aquellas que permiten realizar “comités virtuales”. En estas plataformas un usuario puede solicitar compartir un caso o experiencia clínica con otros especialistas en el día y hora previamente acordado. El profesional ve cubierta una necesidad inminente en el medio online que durante su práctica clínica asistencial no puede cubrir.
4. Plataformas de formación. Existen miles de plataformas que ofrecen formación a los especialistas sobre un área o tema en concreto a los especialistas. Desde hace mucho tiempo la formación online se convirtió en una herramienta más económica en sustitución a los cursos presenciales. Quizás, por esta razón, es complicado poder impactar al especialista con una plataforma diferente y diferencial. El interés de un especialista para realizar un curso de formación pasa en primer lugar por ofrecerle la posibilidad de conseguir un gran número de créditos de formación continuada y, en segundo lugar, por un formato y contenido de interés. Por todo ello, es importante construir los cursos adaptados a las necesidades de la especialidad a la que se dirige. No es fácil sustituir en formato online la practicidad de un curso presencial, en el que se utilicen animales como modelos prácticos para aprender a utilizar un determinado instrumento, o incluso, la situación que se genera en la complicación de un caso del día a día es muy difícil, pero el mundo online nos ofrece grandes avances en este sentido. Enfrentarse y practicar la toma de decisiones en las situaciones reales críticas que con mayor frecuencia se presentan habitualmente en la evaluación, diagnóstico y tratamiento de diferentes enfermedades es ya una realidad en el mundo online. La utilización de diferentes modelos interactivos permite también sustituir la practicidad de modelos animales. El objetivo consiste en ofrecer la información en un formato atractivo e interactivo lo más real posible que facilite al especialista, de un modo práctico, para adquirir los conocimientos y avances presentados durante el curso.
Adaptarnos o adaptarnos: la cuestión es sobrevivir
Como en su día ya dijo Darwin, la supervivencia de cada especie va a depender de la capacidad de adaptación que tenga a los cambios producidos en el medio en que habita. Y en adaptarnos a los cambios, los habitantes del S. XXI nos estamos convirtiendo –a marchas forzadas- en unos expertos.
Las plataformas interactivas de servicios médicos son un claro ejemplo de esta adaptación. Es necesario reinventarse de cara a ofrecer servicios que se ajusten a nuestra realidad actual y sean valorados con interés por parte de los profesionales sanitarios.
Desde las empresas especializadas en proveer servicios científicos, como Discovery Spain, trabajamos como partner tanto de los departamentos de marketing, médico o market access de la industria farmacéutica, como del especialista o Sociedad Científica, colaborando en la creación, gestión y diseño de servicios que den respuesta a cualquier necesidad ¿Cuál es la tuya?