Todos hemos oído alguna vez la frase “la información es poder” y, ¡vaya sí lo es! Las compañías farmacéuticas, cada vez más, necesitamos proveernos de la mejor información para afrontar la toma de decisiones de la manera más eficiente posible. Y empleo adrede el término “información” y no “datos” porque: ¿cuántos sistemas y fuentes de datos tenemos actualmente en nuestras compañías? Decenas, cientos. Y, además, generando volúmenes ingentes de datos de manera continua. Y no hablemos si entramos en el campo de las redes sociales. Pero, ¿de qué nos sirven todos esos datos si no sabemos convertirlos en información bien estructurada, concisa y que sepa responder a nuestras preguntas más importantes?
Es en este punto donde departamentos como el de Business Analytics (análisis de negocio), Commercial Excellence (excelencia comercial) o Business Intelligence (inteligencia de negocio) entran en juego. Aquí se produce la magia: estos departamentos son capaces de capturar datos heterogéneos, disjuntos, complejos y abundantes para convertirlos en información capaz de responder a estas preguntas: “¿Qué estrategia es la mejor para este lanzamiento?”, “¿Dónde están las necesidades más urgentes de esta patología?” o “¿Cuáles son las claves por las que esta táctica funciona tan bien?”, entre otras muchas.
¿Cómo se lleva a cabo este proceso de transformación? La clave de todo es entender con total claridad el porqué del análisis. Antes de arremangarnos y ponernos mano a mano con los datos es necesario entender muy bien cuál es la verdadera motivación para analizar. Este punto es fundamental: si no orientamos correctamente el proceso desde su inicio, podemos vernos completamente perdidos y desorientados más adelante. Por ello, la cercanía con el resto de las áreas de la compañía (médico, ventas, marketing, acceso, finanzas, corporativo, etc.) es primordial para lograr el éxito: los analistas necesitan entender la estrategia y el contexto de la compañía para aportar valor, conociendo bien la colocación de las piezas sobre el tablero, en la preparación de las preguntas a las que necesitamos responder. Como es de imaginar, los recursos necesarios para poner en marcha estos proyectos son elevados y, en numerosas ocasiones, los laboratorios no disponemos de la suficiente capacidad para arrancar todas las iniciativas que nos gustaría llevar a cabo.
La gran suerte es que en la actualidad contamos con los mejores aliados: nuestros partners en consultoría e investigación de mercado. Existen multitud de compañías que ofrecen sus servicios en este campo contando con una gran experiencia a sus espaldas. Es imprescindible saber entablar un modelo de relación óptimo entre ambas partes por varios motivos:
- Estos partners disponen de los recursos especializados, tanto humanos como técnicos, para abordar todas las tareas vinculadas a la recogida, transformación, análisis y presentación de los datos.
- Al trabajar de manera especializada en proyectos de esta índole han adquirido una experiencia muy avanzada y son capaces de establecer las mejores prácticas (best-practices) y estándares en estas áreas de conocimiento.
- La especialización en el campo del análisis por parte de estos partners hace que dediquen cuantiosos recursos para estar a la última en lo que a técnicas de análisis se refiere. Esto repercute en positivo directamente sobre la industria farmacéutica consiguiendo que, de forma conjunta, se evolucione hacía un modelo más avanzado de análisis empleando técnicas de vanguardia, como la inteligencia artificial.
En muchas situaciones, la naturaleza del análisis requerirá de la puesta en marcha de proyectos de investigación de mercado de campo. Contar con la ayuda de estos partners es clave, ya que ellos poseen bases de datos con profesionales con los que se colaborará para la recogida de la información, así como con el conocimiento de las técnicas de estudio necesarias para sacar el máximo provecho a estas iniciativas.
El modelo de relación que se establece entre los laboratorios farmacéuticos y estos partners es de gran cercanía y confianza. En muchas ocasiones, llamamos a su puerta con una necesidad o un reto aún sin forma y ellos son capaces de recoger el guante y darnos respuesta de manera satisfactoria en la dirección adecuada.
En particular, desde Sobi Iberia, biotecnológica internacional dedicada al desarrollo de tratamientos innovadores para las personas que viven con enfermedades poco frecuentes, nuestro objetivo de convertirnos en referente en lanzamiento y desarrollo de terapias y soluciones a las necesidades de los pacientes es una de nuestras principales motivaciones. Por ello, nos apoyamos en este tipo de partners para no estar ciegos a la hora de preparar un lanzamiento. Nuestro modelo de excelencia incorpora una primera fase de descubrimiento de mercado en la que, a través de colaboraciones con diferentes partners, llevamos a cabo iniciativas para conocer al detalle el entorno y conseguir así llegar hasta los pacientes de forma precisa, rápida y efectiva.
Es por ello que en Sobi una pieza fundamental es la mentalidad curiosa y de acción de nuestro equipo de Business Analytics. Esta área colabora transversalmente con el resto de departamentos para entender desde la base cuáles son los puntos ciegos donde es necesario arrojar luz a través de información. Un espíritu creativo lidera la puesta en marcha de iniciativas locales en las que, utilizando una filosofía de Quick-Wins aprovechando al máximo toda la tecnología y recursos de la organización, se pongan en marcha herramientas y procesos que maximizan la recogida, transformación y compartición de información entre las personas clave de la organización.
Un buen equilibrio entre iniciativas locales de análisis y un modelo estrecho de colaboración con los mejores partners de análisis e investigación de la industria es esencial para maximizar el aprovechamiento de los datos que forman parte de nuestro día a día.