El 90% de compañías farmacéuticas planean realizar estudios basados en Real World Data, donde incorporar la información proporcionada por el paciente (PRO) o su experiencia (PRE) complementa en gran medida los resultados de estos estudios.
Hoy en día, nadie concebiría empezar un nuevo tratamiento sin antes haber comprobado su seguridad y su eficacia mediante estudios rigurosos, fiables y científicos, cuyos resultados son aprobados por las agencias sanitarias pertinentes (FDA, EMA…) para su lanzamiento al mercado.
Esta ha sido siempre la principal razón para la puesta en marcha de los Estudios Clínicos: obtener resultados que permitan conocer la eficacia y seguridad de un fármaco o dispositivo.
Sin embargo, actualmente, han adquirido aún más protagonismo al empezar a complementarse con estudios basados en Real World Data (RWD) gracias a su enorme potencial e interés. Esto se refleja en un estudio de Deloitte que menciona que el 90% de las farmacéuticas internacionales realizan o planean realizar estudios basados en RWD.
Los estudios de RWD recogen datos sobre tratamientos, pacientes (datos proporcionados directamente por el paciente y por el médico) y patologías en un contexto no experimental, es decir, capturan los resultados que no se han tenido en cuenta en los estudios protocolizados y que parten de la vida real del paciente durante su tratamiento. Estos estudios, según la EMA, pueden beneficiar a todos los stakeholders involucrados en el desarrollo y uso de los medicamentos (desde pacientes hasta entidades reguladoras), al aportar una visión más holística.
Para capturar esta información, se está empezando a incorporar la perspectiva del propio paciente a través de cuestionarios de calidad de vida y seguimientos personalizados que permiten obtener resultados de gran relevancia e impacto a largo plazo, complementando los Estudios Clínicos tradicionales.
Durante este proceso de recogida de datos, las nuevas tecnologías están desempeñando un papel clave, facilitando esta captura de información del paciente, principalmente a través de aplicaciones móviles que se ponen a su disposición para incorporar la información sobre su patología de una manera rápida y sencilla.
En este sentido y prestando especial atención al gran potencial existente entre la unión de los Estudios Clínicos tradicionales y la información proporcionada por el propio paciente (patient reported outcomes measures y patient reported experience measures: PROMs; PREMs), en Persei vivarium estamos trabajando para facilitar esta tarea a través de nuestra tecnología, la cual permite complementar los estudios realizados a través de nuestra plataforma para gestionar la investigación clínica (ReseaArch), con la visión del paciente desde nuestra app Caaring.
La tecnología nos brinda la oportunidad de comprender mejor cómo vive el paciente la enfermedad y su tratamiento, incorporando sus datos de vida real y su experiencia a los estudios clínicos. Ahora debemos aprovechar este potencial para generar información y estudios de calidad que puedan aportar valor a todos los actores involucrados en el ámbito de la salud, con un mismo fin, mejorar el abordaje y conocimiento de las patologías y sobre todo, la calidad de vida del paciente.