Los profesionales de la salud necesitan poder entrenar habilidades y actitudes que les ayuden a influir en la promoción de hábitos saludables. Desde hace ya unas décadas se viene demostrando que el Counselling, definido como un conjunto de herramientas psicológicas que mejoran la comunicación humana, tiene un gran impacto en el ámbito sanitario a nivel global desde la perspectiva del modelo biopsicosocial.
Podemos imbricar el Counselling dentro la Oficina de Farmacia como un conjunto de técnicas de comunicación que mejoran la relación entre el personal de la farmacia y los pacientes en la calidad de vida de estos, a través de un modelo de relación centrado en el paciente, asesorándoles y guiándoles en el proceso de toma de decisiones.
Se ha demostrado que este modelo de relación ayuda en la adherencia al tratamiento farmacológico, sobre todo en pacientes crónicos, que en la mayoría de los casos se encuentran desesperanzados en su proceso.
El Counselling puede ayudar significativamente en la gestión de las emociones ya que es un modelo de relación horizontal y holístico, donde se contemplan los aspectos psicosomáticos de los pacientes, además de apoyarles para que adquieran un mayor autoconocimiento, mejorar sus tomas de decisiones y su capacidad de autocuidado.
Para llevar a cabo estas técnicas con nuestros pacientes, la empatía es fundamental, así como la escucha activa, entendiendo las necesidades de las personas que pasan por el mostrador desde un trato cercano, sin prejuicios, donde se sientan comprendidos en un espacio confidencial y de respeto.
Algunas de las técnicas que podemos trabajar dentro del Counselling con los pacientes pueden ser:
- Animar al paciente a expresarse: “Explícame la situación”, “No te preocupes”.
- Identificar sus miedos: “Tranquilo, es bastante frecuente”, “No tiene por qué ocurrir tal cosa”.
- Escuchar al paciente: Atendiendo a su lenguaje verbal y no verbal, escucharle sin prejuicios establecidos.
- Conocer las circunstancias del paciente: Cada persona es un mundo y cada persona que pase por la OF va a tener unas circunstancias muy diferentes de sexo, edad, nivel de estudios, situación familiar, etc. Conocer las circunstancias personales es importantísimo para trazar una terapéutica adecuada.
El modelo de Egan (1986) es bastante práctico para llevar a cabo esta “mini psicoterapia” en la OF. Este modelo secuencial se centra en 3 pasos:
1.- Exploring Skills. Escenario actual. Donde el profesional ayuda al paciente a identificar y clarificar sus problemas y preocupaciones. Ejemplo- Paciente con psoriasis en la cara que tiene verdaderos problemas a la hora de relacionarse con su entorno, falta de autoestima, hastiado de la cronicidad de esta enfermedad.
2.- Understanding Skills. Escenario preferido. Ayudar a construir un nuevo escenario ayudando al paciente a establecer metas y objetivos. Ejemplo- Minimizar el impacto de la psoriasis en su calidad de vida.
3.- Acting Skills. Escenario actual. Ayudar al paciente a descubrir, elegir, desarrollar e implantar estrategias de acción. Ejemplo- Consejo farmacéutico de llevar una vida saludable, sin hábitos tóxicos, dieta sana, ejercicio, técnicas sencillas de relajación, poder tomar el sol siempre que pueda con moderación para mejorar la sintomatología, informarle de nuevos tratamientos, marcas punteras en este tratamiento, etc. de las que dispone para la mejora de esta afección cutánea, etc.
Para poder aplicar estas técnicas y poder ser capaces de mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes así como su fidelidad a la OF, hay que poseer ciertas habilidades comunicativas, una formación específica así como un training en materia psicológica, pero sobre todo una capacidad de empatía adecuada, muchas ganas de aprender, una asertividad correcta, así como una verdadera vocación de servicio.
Bibliografía
- Martí-Gil, Barreda-Hernández, Marcos-Pérez, Barreira-Hernández; “Counseling: una herramienta para la mejora de la comunicación con el paciente”. Servicio de Farmacia, Hospital Virgen de la Luz, Cuenca. 2013
- Ratiopharm.es